La búsqueda de la excelencia al interior de la función de mantenimiento
La búsqueda de la excelencia al interior de la función de mantenimiento
Temas como la excelencia operacional, eficiencia, eficacia, costos, viabilidad de la empresa, mantenimiento del crecimiento, entre otros son algunos de los temas que hoy en día son recurrentes en las organizaciones. Esto se debe fundamentalmente al creciente aumento de los precios de las materias primas, unido a la disminución de los precios de nuestros productos o servicios, generado por el aumento de la competencia, produciendo así una “tormenta perfecta”, que inquieta a los gerentes y directivos.
Esta situación lleva a generar dentro de las organizaciones acciones para hacer un cambio en la dirección de éstas, con el fin de ser más eficientes, y que además, por qué no decirlo, mejorar la viabilidad o permanencia en el tiempo. Además elementos como la responsabilidad empresarial pasa hacer fundamental en tiempos donde el empoderamiento de las organizaciones sociales pueden generar presiones insospechadas.
Esta búsqueda incesante lleva a los gerentes y directivos a invertir en estrategias, tecnología y métodos etc. No hay duda que la elección de esta “ayuda” debe (o debería estar) ligada a la necesidad particular de estas organizaciones, suponiendo que las herramientas hayan sido probadas y hayan generado resultados en otras organizaciones.
Es ahí donde está el punto importante. Veamos el siguiente ejemplo:
En el tema energético se dice que la fuente de energía más barata y más limpia proviene del ahorro interno, esto quiere decir, que lo mejor es ahorrar antes de buscar otras fuentes energéticas alternativas. Bajo esta misma lógica, decimos que antes de buscar soluciones en incorporaciones de métodos, debemos buscar las alternativas de fuentes de mejoramiento interno, el origen de estas fuentes está en nuestros propios recursos, esto es nuestra gente en la liberación del potencial creador y talento humano. ¿Pero cómo hacemos que esto ocurra?
Pero por otro lado si no lo hacemos (o no lo hicimos), es porque no hemos tenido una forma o método que nos ayude a buscar esta “fuente de ahorro”. Entonces estamos en un problema.
La pregunta es ¿qué tiene que ver esto con mantenimiento? Pues a mi juicio todo.
En el mercado existe una serie de herramientas de distinta índole, a saber: Six Sigma, RCM, TPM, SMED, LEAN, solo por nombrar algunas, éstas basan su éxito en el aporte decidido de las personas. Mi tesis es que existe una necesidad del hombre de aprender cosas nuevas. Llevado a un extremo, creo que “nadie quiere saber hoy menos que ayer”. Si el programa logra y ataca estos aspectos, no habrá duda que lograremos este apoyo. Esto es, darle forma al concepto de “la organización que aprende”.
Si estamos de acuerdo con lo anterior, la pregunta es ¿cómo logramos esto? no desde la lógica teórica, si no con vivencias de haber estado en el piso de planta.
Hoy en día las organizaciones han ido reconociendo la importancia del mantenimiento y lentamente han pasado de ser conocidos como “fuente de gastos” a una “fuente de ganancias”. Con esto, se está reconociendo la importancia dentro de la búsqueda de la excelencia operacional en las organizaciones. Por lo que, el mantenimiento juega un rol importantísimo dentro de los cambios generados. También por supuesto existe un talento escondido que no aflora en el mundo de los mantenedores y es en ese contexto que debemos sacarlos a la superficie. Pero el mantenimiento se encuentra con una seria de problemáticas, una de ellas es el trabajo que se debe generar y la necesidad de trabajar en equipos con operaciones, situación que no es fácil y que dice relación con el nivel de maduración de la organización.
Como es posible mejorar este trabajo en equipo en un organización que ha decidido cambiar, incorporando alguna herramienta de gestión. La invitación es conocer en detalle esta problemática.